No son pocas las ocasiones en las que nombramos al plumífero amigo para hablar de follón de buena categoría, de lío monumental. Otros más sabios lo llaman “jari”, “marrón” y cosas peores. Al follón al que me refiero es la crisis mundial, nacional y local que nos trae de cabeza. La crisis, es un pollo, y no debe ser al revés, que entonces habría que imaginar un pollo monstruoso, malvado y feo, imaginen: “un pollo es la crisis”. Pies para qué os quiero! No, que suficientemente acojonados estamos ya.
Ni yo, ni los que han decidido escribir en esta gran hoja de papel venimos sin una solución. Como diría yo mismo: “si hay problema, hay solución”. No esperes milagros, pero no creas que está todo perdido.
Y te presentamos la solución, atención: Se apaga la luz, que acalla el redoble de los tambores, un rumor al fondo de la sala termina porque aguantamos la respiración. El cañón de luz enfoca al telón de fondo y ahí está... es una piña!?
Si, pero no. Si es una piña, pero sólo la usaba para explicarme. PIÑA, de hacer PIÑA entre muchos, la unión hace la fuerza, agruparse, aunar fuerzas y derivados de esta expresión que sirven para definir el
paso más importante a la hora de evitar al dichoso pollo.
Pollo&Piña será un grupo de empresarios unidos para una supervivencia sostenible, que por su experiencia se niegan a andar sólos ni un paso más. Digo será, porque este que lees, es el primer paso hacia la creación de este motor.
Creo de verdad que varios empresarios que intercambian contactos, conocimientos, referencias y contratos bajo unas reglas de sentido común les va a permitir viajar a motor y abandonar el transporte a pie.
Los secretos de esa unión y los puntos que nunca más se deben olvidar, están en este papel y en los siguientes números que publicaremos.
Por eso, os recomendamos que leáis atentamente todo lo que tenemos que decir porque va a sonar increiblemente simple, tanto como para no hacer mucho caso. No os equivoquéis, todo lo que decimos lo decimos con años de experiencia, años de sentido común, porque todos los que escriben en este papel, son superdotados del sentido común. Así que léenos con atención y si tienes un minuto escríbenos y dinos en en qué te hemos ayudado y si quieres, quéjate. Puedes unirte al grupo y crecer si teníamos razón, y si no, hacer amistad con unos fieras en sentido común.
Antes de seguir dandote consejos baratos, te queremos advertir de algo muy importante: al pollo hay que tomarle con cierto humor, vaya, no muy en serio. No olvides que al final es sólo un pollo y nada más que un pollo.
Este artículo ha sido escrito por Nicolás Domínguez
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trasamos en decirte cosas, es que hemos
triunfado.